La parábola de la semilla que crece por sí sola

Y decía: "El Reino de Dios es como un hombre que echa la semilla en la tierra: sea que duerma o se levante, de noche y de día, la semilla germina y va creciendo, sin que él sepa cómo. La tierra por sí misma produce primero un tallo, luego una espiga, y al fin grano abundante en la espiga. Cuando el fruto está a punto, él aplica en seguida la hoz, porque ha llegado el tiempo de la cosecha". (Marcos 4,26-29)

Muy queridas hermanas, teniendo cono fondo este hermoso Evangelio quiero compartir una sencilla y breve reflexión, sobre el tiempo , ese tiempo vital que pasa a veces tan rápido, debido a nuestro sistema de vida y de trabajo actual.
Les recuerdo que nuestra CM de Chile, en febrero del 2008 cumplió 20 años, mi historia en la CM comienza con la fundación de la CM en nuestra tierra chilena, por lo tanto ya estamos viviendo el año nº 23 de esta historia de amor...además hace poco, en mi actual lugar de trabajo cumplí 25 años de servicio....entonces estamos hablando del tiempo que pasa, de este día a día que va transcurriendo con altos y bajos en medio de la vida cotidiana que nos toca a cada una...y allí en ese espacio de tiempo tan sencillo y oculto vivimos y seguimos viviendo nuestro llamado, nuestra consagración en la CM....
Pero el tiempo puede pasar de muchas maneras, y mi reflexión apunta precisamente, a ese vivir cada día intensamente, en lo más oculto y ordinario, pero profundamente e intensamente:

renovando cada día y cada noche esa maravillosa conciencia y certeza de que estamos en el Corazón de Jesús y María,
renovando esa pertenencia que nos permite vivir en su oblación, en su comunión, en su misión.....
así la vida nuestra a veces un poquito opaca cobra el brillo y el calor de la consagración. El brillo y el valor de ese repetir con el corazón nuestro ecce venio, ecce ancilla (aquí estoy para que Tú vivas y ames en mi) al comienzo del día, en la misa, en mi oración, en mi pequeña oración de ofrenda, en mi mirada silenciosa y quieta a Jesús en el hermano, en el tabernáculo, en mi propio corazón.....

En la comunión con Jesús, en la unión a su oblación , cada día van pasando maravillas, nuestros pequeños gestos y actos que al parecer allí quedaron...va calando hondo sin que sepamos, a veces lo notamos, otras nunca lo sabremos....pero es así....esa es la vida de amor que pasa y va dejando su huella en la vida.....ese es el tiempo fecundo.
Un ejemplo (cada una puede ir sacando de su mochila muchos) hace unos días me saludó un paciente que me reconoció luego de más de 20 años....el tiempo había pasado...y se acordaba de mi y de alguna atención que tuve que prestarle por mi profesión...no le fue indiferente, ya que luego de 20 años lo recordaba...y uno se pregunta ¿qué pasó, que hice de especial?....tal vez yo , nada...pero Jesús en mi, si llegó con su cariño ....
Hoy en la Misa mensual de mi centro médico , me encontré con un paciente que hace algunos meses visité en su casa(tiene un cáncer de laringe) para llevarle una ayuda, etc....le regalé un escapulario (de género, de tela) y me contó que no se lo saca nunca, pues como es tela ¡¡no es incompatible con su radioterapia...!!! además vino a Misa (invitado por otra colega) y se alegró tanto de tener la posibilidad de venir a la Eucaristía que tratará de venir cada miércoles.....y así nos preguntamos: ¿qué hacemos de extraordinario? Tal vez nada, pero Jesús y María van convirtiendo nuestra agua en vino....en pequeñas semillas que caen en buena tierra...es tan poquito lo que hacemos, y sin embargo el Señor lo hace grande sin que sepamos...

“Gracias Señor, enséñanos a vivir el tiempo que tenemos intensamente , aunque nos parezca fome y rutinario, ayúdanos a agradecer la vida de cada día, la nuestra y la de nuestros hermanos, ayúdanos a que cada noche antes de cerrar los ojos , te miremos a ti, contemplemos tu amor y agradezcamos por el tiempo vivido y entregado. Cada noche dejamos nuestro corazón en tus manos: revísalo, todo es tuyo, lo bueno y lo no tan bueno....te lo entregamos con confianza, porque Tú todo lo conviertes en amor, fuerza, gracia para vivir nuestra consagración en el tiempo que sea abre a nuestros pasos cada día”.

Les cuento que el mes de Julio fue un tiempo muy bendecido para nuestra CM Chilena:

nos encontramos con Ely que vino de vacaciones desde Arica, y pudimos compartir con ella el camino y la alegría de ser CM...envía saludos y espera noticias...
También conocí a Katty, ella es de La Serena (al Norte de Chile, pero un poco más cerca que Ely ) , hace un tiempo que estábamos en contacto por el correo electrónico y tuvimos la oportunidad de conocernos, fue un lindo y bendecido encuentro, transmito algunas palabras suyas que luego me llegaron por correo: “gracias de antemano, obvio soy una alma pequeña inquieta por vuestro camina,,por seguir la senda del Sagrado Corazón de Jesús como fuente de cada uno de sus movimientos, pero humilde hija de Dios que espera a la vez, sacar sus estudios para servir a mis hermanos donde Dios me lleve, con , por y gracias a El...Un abrazo grande hermanita, y gracias por acogerme, espero este camino sea para siempre, y tener la capacidad de aprovecharlo al máximo, paso a paso, y desde el corazón...Paz y bien.” KATTY

Un saludo cariñoso a cada una, recordémonos en la oración....con fuerza y cariño.